El niño que domó el viento - Los sueños pueden cambiar al mundo entero

Título: El niño que domó el viento 

Autor: William Kamkwamba, Bryan Mealer 

Editorial: B DE BLOK (EDICIONES B) 

Fecha de publicación: 2018 

País: España 

Cantidad de páginas: 320 

Género: Biografía 

Subgénero: Drama 

Los sueños pueden cambiar al mundo entero 

Por María José Del Palacio Núñez

El niño que domó el viento
/ Fuente:Amazon

El autor y protagonista de esta hermosa historia de sueños es William Kamkwamba, estudiante de la African Leadership Academy, Instituto Panafricano de segunda enseñanza en la surafricana Johannesburgo. Miembro de TED Global 2007, el Wall Street Journal publicó una reseña de Kamkwamba y sus inventos, expuestos en el Museo de la Ciencia y de la Industria de Chicago los cuales son la prueba fehaciente de que, si se quiere, se puede. 

En el libro se detalla lo que sucedió en Malawi al sur del continente africano, en la aldea de los Kamkwamba, dónde se describe a un joven llamado William, exactamente un niño de tan solo 13 años, quien enfrentó las barreras de un mundo cruel y despiadado que trató por todos los medios de manera eminente opacar sus sueños. Es fundamental resaltar la historia de William, quien desde sus ganas enormes de querer progresar y así lograr ayudar a su familia a salir de la pobreza que vivían, lucha por sus estudios. A causa de esa misma ansiedad de saber, de esa curiosidad y amor por las ciencias, siendo tan solo un niño sin recursos para poder seguir estudiando, es expulsado de su colegio por falta de pagos por la misma pobreza en una África que sufre debido a la miseria que se vivía en su aldea, producto de la falta de lluvias y el despale indiscriminado por parte de una empresa a la que la población le vendía sus árboles para poder subsistir, propiciando más muertes y desesperación en las familias. El pequeño William utiliza su capacidad intelectual para resolver una problemática que cambiaría el rumbo de las cosas. 

El libro también narra las situaciones de las familias, su crianza y frustración debido a que los padres no tuvieron acceso a la educación, por ende, luchaban porque sus hijos estudiaran, aun en sus limitaciones de dinero y comida, ellos comprendían que era necesario asistir para formarse, de este modo no tendrían que pasar sus mismas necesidades, pero la situación era muy pesada tanto en la economía como en la situación socio política que se vivía, como para poder seguir manteniendo firme esta postura, en otras palabras el libro transmite a través de las letras del autor el sufrimiento que padecieron las familias, desde el momento en que tuvieron que mandar a sus hijos a labrar la tierra seca y abandonar los estudios. 

William, describe como aprendió y se destacó por arreglar aparatos electrónicos junto con sus amigos, gracias a los libros del colegio, donde al llegar el momento de expulsión es restringido su acceso a la biblioteca, pero él con astucia logra meterse y seguir leyendo sobre las ciencias que tanto le atraían, el pequeño niño, quien su familia perdió todas las cosechas y se quedó sin nada que comer y nada que vender, entre libros buscó soluciones ante la situación. William también sufría de los regaños de su papá por seguir amando sus estudios y sus ideas de altruista, adjunto de la ida de su hermana por la misma hambruna, no opacaba sus sueños de un mañana mejor. 

Gracias a sus conocimientos, el confiaba siempre en él mismo, en lo que sabía, su padre así una vez le dijo y él siempre lo mantuvo firme, si bien es cierto es duro luchar contra lo que se nos presenta, la historia nos muestra una difícil batalla, entre morir de hambre y sed o buscar soluciones. La realidad de África y sus aldeas es una realidad que durante muchos años ha sido dura, llena de sacrificios y sometimientos, algo que el autor nos logra describir de esa crueldad en lo que narra. 

En la adaptación de cine que se realizó en el año 2019 por el director Chiwetel Ejiofor, quizás no se ahondó tanto en los problemas de explotación, escasez y muerte que se vive, a como lo fue en el libro, pero dentro de lo poco que, si abordaron, se logra dar una idea de la situación que se daba mientras transcurría la historia y vida del pequeño William, la cinta provocó un revuelo, logrando captar a muchos cineastas y lectores de la trama, gracias a esto actualmente es tomada como una historia de ejemplo de lucha, y de perseverancia. 

William logró crear un molino de viento con chatarras y una bicicleta de su papá, quien con amor le hizo entrega después de haber sido renuente ante las suplicas de su hijo de confiar en él, pero lo hizo y eso nos muestra como la fe en los hijos debe ser justa y firme, los padres son el motor de arranque para que los hijos tengan esa fuerza y confianza en que se puede soñar, en que se puede lograr lo que se quiera, con esmero y dedicación, y en efecto este padre, marcado por el dolor y la desesperación demuestra, su amor y fe por su hijo, esta historia lo hizo grande ya que marca un antes y un después en la vida de muchos. 

Los sueños de un pequeño lograron tantas cosas, las palabras de unos padres abnegados y que confiaron en su hijo, forjaron el camino de un ser humano que lucho por él, por los suyos y por los que no tenían, por un mañana mejor, por un mañana sin sed, sin hambre y sin muertes. Si bien es cierto que África aun sufre, pero un molino con remaches, hecho por un niño que leía a escondidas un libro, que no tenía que comer o beber y que logró traer el agua con que sembrarían hortalizas y saciaría la sed de muchos ya es una luz dentro de un mundo de tinieblas, y este libro es eso, una luz para quienes se ven atrapados entre tormentas y dificultades, es un ejemplo de lo que se debe hacer, y es nunca rendirse ante lo que se nos venga encima. 

El empeño y la ilusión del pequeño William cambió el destino de su familia y del país entero, llevando agua potable a su aldea por primera vez, construyendo un aerogenerador y una bomba de agua con la única ayuda de su ingenio, perseverancia y unos pocos amigos que creyeron en él. Y si él pudo, dentro de sus tantas limitaciones, siendo apenas un niño, entonces no hay peros para quienes aún seguimos soñando. 

 Esta historia se convirtió convirtiéndose en más que letras, es una historia llena de enseñanzas, que cala en el corazón y en la mente de muchos, siendo un tesoro para compartir y que muchos deberían conocer, porque la lucha es constante y las limitaciones muchas, pero uno tiene la última palabra.